Disfrutando del programa MasterChef

Todos disfrutamos de los diferentes programas de concursos, donde los participantes van demostrando sus habilidades para así pasar a la siguiente ronda hasta terminar con el ganador absoluto.

Uno de los programas de esta clase que atrae la atención de millones de televidentes en todo el mundo es MasterChef, en este concurso diferentes personas con conocimientos culinarios pero sin ser profesionales de la cocina, compiten en cada programa para preparar el mejor plato que luego será evaluado por un jurado de expertos chefs que elegirán el plato ganador del día y eliminarán al concursante que haya elaborado el que ellos consideren el peor plato.

Así hasta llegar a la gran final donde se elige al ganador de MasterChef el cual será premiado con una gran cantidad de dinero y el derecho de publicar su propio libro de recetas.

La edición 2020 de MasterChef España, que fue grabada antes de comenzar la pandemia, ya está en su etapa final y los televidentes esperan con ansia el resultado para ver si su concursante favorito fue el vencedor en esta edición del concurso.

Pronto lo sabremos y celebraremos o nos sentiremos decepcionados, pero habremos disfrutado al máximo de este excelente programa.

La versión de famosos es divertida, porque ves a todos en plan competición y siempre acaban contando cosas divertidas y haciendo espectáculo porque es a lo que se dedican.

Los cocineros profesionales que hacen de jueces me parecen unos prepotentes, y muy subiditos con las críticas, ellos han llegado a su nivel a base de años de trabajo y experiencia, no puedes exigir a gente que acaba de llegar a los fogones que ejecuten y cumplan con tiempos imposibles a la perfección, porque les faltan muchos años de práctica.

lo más divertido de masterchef es la versión celebrity.

Qué me decís de Josy y su bruma, me meo de la risa cada vez que aparece.

Bueno y la terremoto de alcorcón que es una pedazo de mujer, aunque a la soprano no la soporto, menuda trepa.

estamos siempre deseando que llegue el día para desconectar y echarnos unas risas.