Sonorizar "un patio con macetas"

Un primer problema es calibrar bien la potencia exacta de nuestro sonido.

Es problemático tanto pasarse como quedarse corto.

Si pensamos en sonido profesional seguramente nos vamos a pasar de potencia y no vamos a poder disfrutar de las prestaciones del montaje.

Ésto es como si disponemos de un cañon enorme y solo ponemos una poca pólvora en su detonador.

Sería ridículo.

Por tanto, como no podemos alcanzar el nivel máximo de sonido contratado a la empresa, mejor ubicar nuestro escenario en un campo abierto.

Además de no poder alcanzar el nivel máximo de sonido en patios de 100 metros cuadrados aproximadamente, también aparecen otros efectos indeseables como la reverberación excesiva o el denominado "tiro de chimenea" que produce sonido excesivo fuera del recinto.

Algunos problemas añadidos son la falta de espacio para montar un escenario grande y la falta de espacio de pista o grada, lo que que restaría capacidad, calidad y seguridad al evento.