¿Por Qué Una Baja Autoestima?

Como lo mencioné en el artículo anterior, es grande la cantidad de personas que sufren una baja autoestima, con su conocido sentimiento de impotencia e inferioridad ante las demás personas y como también lo hemos anotado antes, esto nos priva de ser felices y, también, de ser productivos, afectándonos a nosotros mismos y afectando a las personas que nos rodean.

La falta de autoestima es un estado de insatisfacción con nosotros mismos, que nos lleva sufrir una severa autocrítica, generalmente sin razón y sobre cosas que, solo existen en nuestra imaginación.

Una baja autoestima no permite ver las cosas buenas que hay en nosotros; y peor aún, son acciones que se realizan contrastándolas o comparándolas con otras personas; esta situación produce en las personas un sentimiento de culpa, por "ser como son" y su condición los conduce a la inactividad.

Pero ¿qué podrá ser tan fuerte que opaque nuestra autoestima llevándola a niveles tan bajos que nos quite la felicidad?

1.- Empecemos por responsabilizar a un sistema engañoso reinante, que nos ha hecho creer que nuestro bienestar depende de factores tan simples como el dinero, la belleza, los grados académicos, la religión o la política.

2.- El miedo.

Para algunos autores, el miedo es una emoción, producto de un sentimiento de peligro, real o supuesto; pasado, presente o futuro.

La experiencia ha demostrado, que la baja autoestima, se fundamenta, generalmente, en el miedo a peligros supuestos, los cuales, creemos, somos incapaces de enfrentar.

Pero ese sentimiento de peligro, en muchos de los casos, es provocado por agentes externos que, emulando la "Divina Comedia", ya nos han enviado a algún lugar del infierno, envolviéndonos en historias de ultratumba y extraterrestres, para robarnos la felicidad a un punto que bien podríamos expresar al tenor de Dante Alighieriy ¡Cuán dura cosa es decir cuál era esta salvaje selva, áspera y fuerte que me vuelve el temor al pensamiento!


3.- Las odiosas comparaciones.

La expresión toda comparación es odiosa, es más real aún, cuando esa comparación la hace la persona misma con relación a otras personas, no solo colocando a éstas en lugares privilegiados, sino subestimándose a sí mismo y colocándose en un lugar muy bajo y considerándose el peor de los mortales.

Comience a limpiar su camino de estas cosas que han venido causando que su autoestima no esté donde debiera estar y, para ello, el primer paso será reconocer que realmente, estas son algunas de las causas que están afectándolo, en el desarrollo de una vida feliz.

Una vez que esté consciente de ello, enfréntelo y empiece a trabajar.

-> Aléjese de cualquier sistema que sienta que continuamente lo trata de inculpar, no importa cual sea ese sistema.

Piense que usted no es rico por lo que tiene, sino por lo que es.

Que su principal belleza está en su interior.

Que el conocimiento y la experiencia no la dan los títulos académicos y que éstos últimos son un logro más que usted puede obtener.

Que la religión verdadera es su relación íntima con su Creador y el respeto a sus leyes y que es a Él a quien debe darle la gloria y el honor.


Que los sistemas políticos los políticos mismos están cada día más corrompidos y que usted no tiene nada que envidiarles.

-> Aleje de usted el miedo.

Piense que usted es fuerte, que usted sabe, que usted puede.

-> Ahora sí, vamos a permitir un grado de comparación, en sentido inverso a aquella comparación que se hace denigrándonos a nosotros mismo.

Piense que si otro puede, usted también puede, si otro triunfó, usted también va a triunfar.

Compárese con usted mismo y cuando vea ese líder triunfador que hay en usted, imítelo y trate de superarlo.

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